
De clara influencia arquitectónica germana y por lo tanto gótica, su padre Juan que nació en Colonia (Alemania) fue quién más participó activamente en la dirección constructiva de la catedral de Burgos; introduciendo en Castilla el gótico flamígero, cuyo máximo exponente eran las agujas que remataban las torres de la catedral y que fueron destruidas en 1539.
Simón de Colonia por lo tanto continúa la labor de su padre en el templo burgalés, y en 1481 es nombrado maestro mayor de las obras.
Su labor más reconocida y excelsa es la Capilla de los Condestables donde remarca su gusto gótico germánico con la creación en el interior y exterior de varios escudos blasonados (Los Condestables de Castilla) que rendían tributo a las familias patrocinadoras. Reconocido con sólo alzar la vista en esta capilla, y de una belleza escultórica sublime, es el cimborrio que corona la misma junto a los nervios típicamente góticos de la bóveda.

En la provincia participa en el Monasterio de San Salvador de Oña, la iglesia de San pedro de Arlanza (hoy en ruinas) y la de San Juan de Ortega.
Simón de Colonia evoluciona en el estudio y se adapta a las nuevas tendencias de su tiempo, convirtiéndose en su última época en uno de los mejores exponentes del estilo Isabelino. A él corresponden las fachadas del colegio de San Gregorio y de la iglesia de San Pablo en Valladolid.
Siguiendo la tradición familiar que comenzara en la lejana ciudad alemana de Colonia, en Burgos le sucede su hijo también arquitecto y escultor Francisco de Colonia.
2 comentarios:
Qué bonita es la catedral de Burgos, y la capilla de los Condestables. Para construir algo así hay que dedicar varias vidas.
Besos.
jooo impresionante nuestra catedarl de burgos jiij mooooola, que bonita que es..
eso si es un trabajo de chinos
ALMA
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