viernes, 28 de junio de 2024

Pistachos

 


¿Qué podemos encontrar en una ración de pistachos?

Si echamos un vistazo a las particularidades nutricionales de los pistachos veremos que estamos frente a lo que podríamos considerar una verdadera superestrella. En una ración de pistachos, unos 30-50 gramos, podemos encontrar 160 calorías; casi 5 gramos de proteínas –se consideran una fuente de proteína completa, es decir, contienen todos los aminoácidos que necesitamos—; 1,80 gramos de grasa saturada y 8 gramos de insaturada; un poco más de 4 gramos de hidratos de carbono y casi 2 gramos de fibra.

Pero, además, obtenemos dosis interesantes de potasio, fósforo –se calcula que una ración de pistachos aporta el 15% de la ingesta recomendada de fósforo–, calcio y magnesio; así como folatos y vitamina A, de acuerdo con información de la Fundación Española de Nutrición (FEN).

 Cuáles son los principales beneficios de los pistachos

Ante este paraíso nutricional no es de extrañar que su consumo no solo consiga deleitarnos con su particular sabor sino que además sea de gran ayuda y muy saludable. Veamos qué dice la ciencia sobre algunos de sus principales beneficios.

1.- Refuerzan la salud cardiovascular

Un consumo moderado de pistachos nos ayuda a mantener los niveles de colesterol en valores saludables, con efectos cardiosaludables beneficiosos. Las investigaciones así lo demuestran al confirmar que este fruto seco favorece la reducción de los niveles de colesterol LDL, el malo, y aumenta el colesterol HDL, el bueno.

Además, en una revisión de 34 estudios los expertos concluyen que, en comparación con las dietas enriquecidas con nueces, avellanas o almendras, las enriquecidas con pistachos son más efectivas para reducir los niveles de colesterol total, colesterol LDL y triglicéridos.

2.- Están relacionados con la regulación del azúcar en sangre

Este es uno de los principales beneficios que se asocian con los pistachos: el de regular el nivel de glucemia en sangre después de las comidas gracias a que tienen un índice glucémico bajo. Así lo demuestra una investigación publicada en Nature, según la cual el efecto es mínimo cuando el pistacho se consume solo, pero si se consume tras una comida rica en carbohidratos se observa una mayor regulación glucémica.

Los estudios sugieren que el consumo regular de pistachos puede ayudar con el control de la glucosa y la insulina, lo que es particularmente valioso para personas que deben controlar la diabetes tipo 2.

3.- Contienen antioxidantes

Si bien todos los frutos secos son una buena fuente de antioxidantes como la luteína, la zeaxantina, las antocianinas o los flavonoides, los pistachos ganan por goleada. Tanto es así que, según una investigación publicada en Plants, los pistachos se encuentran entre los 50 alimentos principales en cuanto a capacidad antioxidante, incluso superior que la de los arándanos negros o las cerezas, lo que hace que destaquen por su capacidad preventiva sobre células tumorales de ciertos tipos de cáncer, como el de colon, hígado o mama. También contienen clorofila, un compuesto antioxidante que es el que da a los pistachos su particular tono verdoso.

4.- Ayudan a la salud intestinal

Los pistachos, igual que otros de sus parientes, son una importante fuente de fibra prebiótica. Por tanto, nos ayuda a ‘mover’ los alimentos a través del tracto digestivo y mantener la regularidad. De acuerdo con los resultados de una investigación publicada en The British Jouranl of Nutrition, la ingesta de pistachos se relaciona con un aumento de bacterias intestinales ‘buenas’, incluso más que si comemos almendras.

5.- Son buenos para la vista

Gracias a su contenido en luteína, zeaxantina y vitaminas E y B2 los pistachos pueden ayudar areducir el riesgo de algunas enfermedades visuales que se asocian a la edad, como las cataratas o la degeneración macular relacionada con la edad, según un estudio de la Asociación de Optometristas estadounidense. La luteína y la zeaxantina protegen las células de los radicales libres dañinos en los ojos.

6.- Son una ayuda para el sistema inmunológico

Los pistachos eclipsan a otros frutos secos por su contenido en vitamina B6, importante para la formación de hemoglobina en el cuerpo, que ayuda a transportar oxígeno a los glóbulos rojos y a mantener el sistema nervioso y el inmunológico más sanos.

Un puñado de pistachos al día

¿Cuántos pistachos podemos tomar al día? Si queremos sacar provecho de todas estas bondades nutricionales debemos tener en cuenta algunas consideraciones. La ración recomendada de frutos secos en general y de pistachos en particular es de unos 25-30 gramos al día (con cáscara y sin sal), que podemos calcular tomando como medida un puñado, es decir, la cantidad que nos quepa al cerrar la mano.

jueves, 20 de junio de 2024

HUERTA DE ARRIBA (Burgos)

 

Huerta de Arriba es una localidad y un municipio, situado al este de la provincia de Burgos, en la frontera con La Rioja, en el centro de ese valle que recibe el nombre de Valdelaguna, atravesado por el rio Tejero, en el corazón de la Sierra de la Demanda.

El primer manuscrito que hace referencia a este pueblo como “Orta Superiora” data del año 1045, pero la importancia de este pueblo es anterior a esta fecha, ya que en sus tierras se encontraron restos de la edad de bronce que se componen de hachas, puntas de lanzas, dagas, brazaletes y navajas, se encuentra en la actualidad en el Museo de Valencia.

El auge del pueblo tiene lugar gracias a la ganadería, especialmente por la actividad trashumante de rebaños de ovejas, que desde 1273 disfrutaron de la tutela del Honrado Concejo de la Mesta. Pueblo de tradición trashumante hasta hace poco.

Es reseñable el casco urbano de Huerta de Arriba. Su observa que fue una villa de categoría, como se puede apreciar en sus casas blasonadas, hasta una veintena de ellas, con diferentes inscripciones del siglo XVII y del XVIII en las fachadas.

En el centro del caserío de Huerta de Arriba, presidiendo una plaza y cercana al Ayuntamiento se alza la fábrica barroca de la iglesia de San Martín, en la que hay un acoplamiento perfecto entre el primitivo estilo románico del ábside cuadrado y la bóveda de cañón, con el resto de la iglesia de corte neoclásico que data del año 1729. Destaca en este hermoso templo el retablo mayor, de estilo neoclásico, aunque con ciertas tendencias del barroco.


A las afueras del pueblo las ermitas de Santa María y de San Vítores.

Huerta de Arriba en los bellos parajes de la Sierra de Neila, tiene en sus alrededores una magnífica oferta de paisajes naturales de los que disfrutar y relajarse.

 

sábado, 8 de junio de 2024

Los cucos

 


Los cucos evolucionan para parecerse a sus huéspedes cuando les invaden el nido, y forman nuevas especies en el proceso

 Los cucos (género Cuculus) son los okupas de la naturaleza. Tienen un comportamiento reproductivo conocido como parasitismo de puesta. Esta estrategia implica que la hembra del cuco no construye su propio nido ni cría a sus propios polluelos. En su lugar, pone sus huevos en los nidos de otras especies de aves.

 La teoría de la coevolución afirma que cuando las especies que interactúan estrechamente impulsan cambios evolutivos entre sí, pueden dar lugar a la especiación, es decir, a la evolución de nuevas especies. Pero, hasta ahora, las pruebas de ello en el mundo real eran escasas. Ahora, un equipo de investigadores ha hallado pruebas de que la coevolución está vinculada a la especiación estudiando la carrera armamentística evolutiva entre los cucos y las aves huésped que explotan.

 Los cucos de bronce ponen sus huevos en los nidos de pequeños pájaros cantores. Poco después de nacer, el polluelo empuja los huevos del huésped fuera del nido. El huésped no sólo pierde todos sus huevos, sino que pasa varias semanas criando al cuco, lo que le roba un tiempo valioso que podría dedicar a la reproducción.

 Cada especie de cuco bronce se asemeja mucho al aspecto de los polluelos de su huésped, lo que engaña a los padres del huésped para que acepten al cuco.

 DISTINTOS HUÉSPEDES, DISTINTAS ESPECIES DE CUCO

El estudio que se publica en la revista Science muestra cómo estas interacciones pueden hacer surgir nuevas especies cuando una especie de cuco explota varios hospedadores diferentes. Si los pollos de cada especie anfitriona tienen un aspecto distinto y los anfitriones rechazan a los polluelos de aspecto extraño, la especie de cuco diverge en linajes genéticos separados, cada uno de los cuales imita a los pollos de su anfitrión preferido. Estos nuevos linajes son la primera señal de la aparición de nuevas especies.

 «Este nuevo y emocionante hallazgo podría aplicarse a cualquier pareja de especies que luchen entre sí. Como hemos visto con el cuco, la carrera armamentística coevolutiva podría hacer surgir nuevas especies y aumentar la biodiversidad de nuestro planeta», afirma el profesor Kilner, del Departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge y coautor del informe.

Las sorprendentes diferencias entre los pollos de los distintos linajes de cucos broncíneos se corresponden con sutiles diferencias en el plumaje y las llamadas de los adultos, que ayudan a los machos y hembras especializados en el mismo huésped a reconocerse y emparejarse entre sí.

 Los cucos son muy costosos para sus huéspedes, por lo que éstos han desarrollado la capacidad de reconocerlos y expulsarlos de sus nidos», explica Naomi Langmore, profesora de la Universidad Nacional Australiana de Canberra y autora principal del estudio.

 Y añade: «Sólo los cucos que más se parecen a los polluelos del anfitrión tienen alguna posibilidad de escapar a la detección, por lo que a lo largo de muchas generaciones los polluelos de cuco han evolucionado hasta imitar a los del anfitrión».

 El estudio reveló que es más probable que la coevolución impulse la especiación cuando los cucos son muy costosos para sus hospedadores, lo que lleva a una «carrera armamentística coevolutiva» entre las defensas del hospedador y las contraadaptaciones del cuco.

 Un análisis a gran escala de todas las especies de cucos reveló que los linajes más costosos para sus hospedadores presentan tasas de especiación más elevadas que las especies de cucos menos costosas y sus parientes no parasíticos.

 «Este hallazgo es significativo en biología evolutiva, pues demuestra que la coevolución entre especies que interactúan aumenta la biodiversidad al impulsar la especiación», afirma la Dra. Clare Holleley, de la Colección Nacional Australiana de Fauna Silvestre del CSIRO de Canberra y autora principal del informe.

 El estudio fue posible gracias al gran avance del equipo en la extracción de ADN de cáscaras de huevo de colecciones históricas y su secuenciación para estudios genéticos. Los investigadores pudieron así combinar dos décadas de trabajo de campo sobre comportamiento con el análisis del ADN de especímenes de huevos y aves conservados en museos y colecciones.

 Fuente: Quo