Noticia curiosa e interesante.
Un matrimonio chileno recorrió unos 30.000 kilómetros en 195 días, desde Estados Unidos a Chile, a bordo de un vehículo acondicionado para funcionar con aceite usado de cocina, informa el diario La Tercera.
Carlos Herrera, de 31 años, y María José Calderón, de 30, ambos ambientalistas chilenos que viven en Estados Unidos, partieron el 17 de noviembre de 2009 desde California, a bordo de 'Chasqui', como llaman su camioneta Suburban 1995, que tiene un tanque para biocombustible.
Llegaron a Santiago el 4 de junio último, tras recorrer una distancia de casi 30.000 kilómetros.
"La idea partió porque nos interesa el medio ambiente y con este viaje demostramos que se pueden hacer cosas sin contaminar. En comparación con el diesel, el aceite vegetal reduce el 90% las partículas que contaminan", comenta Herrera, quien es profesor de español en Oakland.
Carlos explica que el automóvil tiene dos tanques: uno con diesel, que sirve para el encendido del vehículo, y el otro con biocombustible, que es activado después de siete minutos, para el desplazamiento.
La pareja recolectó aceite usado de un restaurante en California para cargar el tanque de su camioneta, e iniciaron su recorrido por tierra pasando por México y varios países de Centroamérica, para luego pasar a Colombia, Venezuela, Brasil, Uruguay, Argentina y, finalmente, Chile.
Dependiendo del aceite, el automóvil puede despedir olor desde patatas fritas hasta comida china, dicen los esposos. En el camino, recolectaron más de 2.000 litros de aceite que luego filtraban para colocar en el motor.
Un matrimonio chileno recorrió unos 30.000 kilómetros en 195 días, desde Estados Unidos a Chile, a bordo de un vehículo acondicionado para funcionar con aceite usado de cocina, informa el diario La Tercera.
Carlos Herrera, de 31 años, y María José Calderón, de 30, ambos ambientalistas chilenos que viven en Estados Unidos, partieron el 17 de noviembre de 2009 desde California, a bordo de 'Chasqui', como llaman su camioneta Suburban 1995, que tiene un tanque para biocombustible.
Llegaron a Santiago el 4 de junio último, tras recorrer una distancia de casi 30.000 kilómetros.
"La idea partió porque nos interesa el medio ambiente y con este viaje demostramos que se pueden hacer cosas sin contaminar. En comparación con el diesel, el aceite vegetal reduce el 90% las partículas que contaminan", comenta Herrera, quien es profesor de español en Oakland.
Carlos explica que el automóvil tiene dos tanques: uno con diesel, que sirve para el encendido del vehículo, y el otro con biocombustible, que es activado después de siete minutos, para el desplazamiento.
La pareja recolectó aceite usado de un restaurante en California para cargar el tanque de su camioneta, e iniciaron su recorrido por tierra pasando por México y varios países de Centroamérica, para luego pasar a Colombia, Venezuela, Brasil, Uruguay, Argentina y, finalmente, Chile.
Dependiendo del aceite, el automóvil puede despedir olor desde patatas fritas hasta comida china, dicen los esposos. En el camino, recolectaron más de 2.000 litros de aceite que luego filtraban para colocar en el motor.
3 comentarios:
Anda, pues a mí me sobra aceite en casa. Ahora solo me falta conseguir un coche así.
Debe ser un punto estar en un atasco detrás de un coche que suelta olor a comida china o a tortilla de patata. Besos.
Bea no lo diras por el aceite de las costillas de Mercadona que tan buenas estan verdad?
Que sepas que te las voy a poner yo el proximo 20 de julio aqui en Madrid. jejejejjje
Besotes
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