La copa del mundo de fútbol viene a España

Madrid. La selección española se dio ayer un auténtico baño de masas en su desfile por las calles de Madrid. Subidos en un autobús descapotable, los de Vicente del Bosque celebraron su triunfo del Mundial aclamado por miles de personas que estuvieron acompañando el recorrido de la Roja. La familia real, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y miles de aficionados apoyaron, se volcaron en elogios y agradecieron a los jugadores españoles el esfuerzo y el talento que les llevó hacia el título mundial en Sudáfrica.

El Palacio Real fue la primera cita de la selección. El Rey dio las gracias a los jugadores por "hacer realidad los mejores sueños" al ganar el Mundial de Sudáfrica y por ser ejemplo de "deportividad, nobleza, buen juego y trabajo en equipo".

Desde el Palacio Real, la selección se trasladó al Palacio de la Moncloa para ser recibidos por el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien presidió una recepción multitudinaria a la selección en el Palacio de la Moncloa y consideró que tras el éxito de la Roja está "la fuerza unida de todos los españoles para que la mejor imagen de España brille en todo el mundo". Zapatero levantó la Copa del Mundo que recogió de manos del capitán de la selección, Iker Casillas, e, incluso, llegó a botar sobre el escenario con el resto de jugadores y a hacer reverencias al portero del equipo nacional.

Los jugadores de la Selección española colapsaron Madrid. Desde el Palacio de la Moncloa recorrieron en autobús descapotable las calles de Madrid acompañados por más de un millón de personas vestidas de rojo por Princesa, Plaza de España, Gran Vía, Plaza de Cibeles, Paseo del Prado, Neptuno. Atocha, Ronda de Atocha, Puerta de Toledo para llegar hasta la explanada Puente del Rey, donde culminó la fiesta.