domingo, 19 de abril de 2009

Leer un libro es volver a nacer


Leer un libro es volver a nacer. Es el camino para apropiarnos de un mundo y de una visión del hombre que, a partir de ese momento, entran a formar parte de nuestro ser. Una lectura disfrutada con riqueza y plenitud, es la conquista más plena que puede hacer un hombre en su vida. Hay una condición esencial que hará que este regalo de los dioses sea para siempre. La lectura debe causarnos placer. Un placer que venga de lo más hondo del alma y que ha de quedarse allí intacto y disponible. Esto nos llevará a otro de los dones que concede la lectura y es la relectura. Así, volver a leer un libro tendrá siempre una condición reveladora y es ésta: a cada lectura el libro se nos va a presentar con un nuevo rostro, con nuevos mensajes, con otros ángulos para percibir el mundo y los seres que lo pueblan.


Suele hablarse en estos tiempos de la desaparición del libro por obra de tecnologías aparentemente inevitables. Grave error el pensar así. El libro acompañará al hombre hasta su último día sobre la tierra. Sencillamente porque ha sido la más alta representación de la presencia del hombre en el universo. Cuidemos el libro, amemos el libro, en el libro se esconden las más secretas claves de nuestro paso por la tierra, el más absoluto testimonio de nuestra esencia como hombres. El libro es el mensajero de un más allá cuyo rostro no acabamos de percibir.

A. Mutis.

2 comentarios:

Beatriz Montero dijo...

Qué bueno es leer y cómo alimenta el alma que no a Alma ¿O también?

Hoy 23 de abril es el día del Libro. Felicidades a todos los lectores. Yo lo celebraré contando cuentos.
Besos.

Emilio Montero dijo...

Bueno, sabeis que dentro de poco la tecnologia con la cultura se mezclara más que nunca.
Salen los libros digitales, son máquinas donde podremos leer libros en algo parecido a una pantalla de ordenador, con la diferencia que engaña al ojo pareciendo como si fuera realmente papel, incluso empiezan a salir pantallas no-rigidas como si fuera papel...
Que fuerte.

ErrEmilin